Las tres Gracias de la mitología griega, con gran belleza, magia y encanto, dignas hijas de Zeus y Eurínome. Ellas gobernaban y disponían de grandes banquetes y bonitos bailes, en las ocasiones de trato social, contagiando de alegría y felicidad a todo aquel que asistía.
Historia de Las Tres Gracias
Pietro Ceccarelli, en su momento era un escultor italiano que realizó grandes cantidades de viajes a Venezuela entre 1925 y 1942. Según lo establece el Diccionario Biográfico de las Artes Visuales de Venezuela (GAN 2005), se desconoce el tiempo exacto en la cual Ceccarelli permanecía en el país, de igual manera las distintas fechas en que entraba y salía Ceccarelli del mismo.
Se menciona que Ceccarelli arribó al país por primera vez por una invitación que le fue realizada por el Señor Sandro Mondolfi, que para ese momento era un famoso Ministro de Italia y un embajador del mismo en Venezuela, estando en el mismo efectuó numerosas piezas funerarias, conmemorativas y oficiales.
La obra de Las Tres Gracias, estuvo delegada a Pietro Ceccarelli por el Señor Gonzalo Gómez, para que este la llevara para la residencia de la Quebrada ubicada en La Victoria, Estado Aragua.
Asimismo se señala que Gonzalo Gómez era el hijo de Juan Vicente Gómez y la residencia en la cual fue ubicada la escultura de Las Tres Gracias era del Señor Juan Vicente Gómez personaje de gran importancia en Venezuela.
La escultura de Las Tres Gracias fue realizada en el taller del artista en la Ciudad de Florencia, Italia y traída a Caracas en 1927. En la actualidad existen dos versiones distintas la primera es que, la obra es una copia de una escultura del Señor Antonio Canova y se encuentra en el Museo L’ Ermitage.
Este se ubica en la Ciudad de San Petersburgo y la otra versión es que fue plasmada por el mismo Antonio Canova, que establece que es propiedad del Victoria and Albert Museum y de la Galería Nacional de Escocia lo cierto es que ninguna de las dos versiones se han definido o en este caso verificado.
Para el año 1946, se construye la Plaza que en la actualidad lleva el nombre de la escultura (Las Tres Gracias), en ese momento ya se estaban empezando a desarrollar grandes cantidades de urbanizaciones.
A lo largo de la ciudad y que se extendían y mientras más pasaba el tiempo más edificaciones eran construidas más allá del antiguo Centro Colonial (Construcción de gran importancia para la época y ciudad).
La Plaza fue diseñada por el Catalán Joseph Mimo I Mena, en el cual quedó con el nombre de “Plaza de Bellas Artes”. Aunque no se tiene conocimiento con exactitud en qué año fue instalada la escultura de Las Tres Gracias en la Plaza.
Ni el porqué se decidió que fuese transformada dicha plaza en un centro urbano dedicado a las pieza de Pietro Ceccarelli, pero la que sí se sabe es que el paisajismo de la plaza con los árboles de cipreses, sauces llorones y las diferentes plantas florales se ajustaba perfectamente dándole esa belleza y hermosura en la cual se convirtió en un centro de atracción. (Ver articulo: Museo Van Gogh)
Obra Las tres Gracias
Las Tres Gracias en un cuadro del pintor barroco Pedro Pablo Rubens, dicho cuadro fue exhibido en el Museo del Prado de Madrid de la Ciudad de España. El cuadro antes mencionado fue pintado al óleo, y contó con unas medidas de 221 cm de alto por 191 cm de ancho.
El cuadro de Las Tres Gracias estaba conformado por tres diosas hijas de Zeus y la Ninfa Eurinome, para en ese entonces la Ninfa Eurinome era la hija del popular titán del Océano. El nombre del cuadro de Las Tres Gracias proviene de las tres diosas del hechizo, la alegría y el amor.
Cada diosa poseía su calificativo, en la cual se detalla de la siguiente manera: Eufrosine, Talía y Áglae, no obstante la diosa Áglae era muy nombrada y reconocida por muchos historiadores como Aglaya.
Autor de Las Tres Gracias
Peter Paul Rubens nació en Alemania en 1577, fue un pintor barroco muy significativo, en la cual perteneció a la escuela Flamenca, el mismo estuvo influenciado por diferentes pintores.
Reconocidos por sus grandes obras y pinturas como lo fueron Leonardo da Vinci, Tiziano y Miguel Ángel. Rubens pintó la obra Las Tres Gracias al final de su vida así como lo hizo Leonardo da Vinci con la Gioconda que ninguno de los dos se separaron de sus obras hasta la muerte.
Esta obra vitalista y sensual, es uno de los cuadros barroco con más trascendencia a nivel mundial por todo lo que significó y sigue aún se sigue manteniendo, de la misma manera se puede contemplar,en la sala nueve del Museo del Prado en la ciudad de España.
La segunda fémina expuesta en la pintura tiene el rostro de una de las esposas del artista, considerada una de las mujeres más hermosas de la época. (Elena Fourment)
Cuando Rubens contaba con apenas 16 años de edad. En ella pudo encontrar el apoyo, la felicidad y la inspiración necesaria para afrontar los últimos años de vida los rostros y sus cuerpos de la segunda y tercera imágenes se considera los ángulos de espaldas y de frente de su segunda esposa Helena Fourment. Peter Paul Rubens muere en Bélgica en el año 1640 a la edad de 63 años. (Ver articulo: Casa de Murillo)
La originalidad de los antiguos flamencos se empezó a perder a mediado del siglo XVI debido a los numerosos pintores italianos que cada vez iban en aumento, pero en el siglo XVII Rubens reinante con una nueva y peculiar pintura flamenca.
El catolicismo reinante en la ciudad ayudó a conservar las pinturas, las esculturas y los temas religiosos, aunque no se caracterizaban por la emoción en cambio en otras pinturas, si se destacaba por ser optimista y de carácter alegre, y se inclinaban a los diversos aspectos más placenteros de la vida.
Mitología
Aquí se le va explicar de manera minuciosa el nombre de Las Tres Gracias proviene del famoso titán Océano. En la cual les colocó a sus tres hijas, que en su momento eran diosas Eufrosine, Talía y Aglaea esta última era muy nombrada y reconocida por los historiadores como Aglaya. Eran las diosas del hechizo, la alegría y la belleza.
Esta historia a través de los años ha sido modificada muchas veces por lo tanto no se puede afirmar cuál era la cualidad exacta de cada unas de ellas, y en la realidad lo que si se sabe es que fueron diosas cada mujer contaba con una característica en especial.
Si bien, se menciona que Eufrosine (La Golosa), Talía (La Floreciente) y Aglaea o Aglaya (La Deslumbrante). El primero en mencionarlas fue el poeta griego de nombre Hesíodo en el siglo VII a.C en su obra Teogonía, pero la no se tiene una respuesta certera.
Ellas eran la que se encargaban de dirigir, administrar e imponer todos aquellos eventos que el placer fuese el ingrediente principal, así como las buenas comidas y banquetes que se les servían a los ciudadanos de esa ciudad, los espectáculos de danza y juegos tradicionales que existían para ese entonces.
Tenían la capacidad de ofrecerles la mayor alegría tanto a los dioses como a mortales, pero también transmitían muy buenos consejos y sobre todo en sabiduría. Por ello se decía que todas estas personas que eran bendecidos por una de estas Tres Gracias, transformaría en un gran orador, filósofo, artista, entre otras.
Las Tres Gracias eran de las sociedades más comunes de los dioses que se encontraba en el olimpo, siendo fundamental la compañía de la diosa Afrodita y del dios Eros, ya que siempre llegaron a conservar una estrecha y consolidada relación con las musas.
Con las que solían frecuentar y se divertían al ritmo de la música que tocaba el dios Apolo, estas fiestas eran muy visitadas por grandes cantidades de personas que habitualmente se llevaban a cabo en el olimpo, las fiestas eran tan divertidas que siempre fueron apreciadas tanto por dioses como por humanos.
Como lo habla la historia Las Tres Gracias eran jóvenes bellas, maravillosas y admirables que de ningún modo ni en ningún momento lo llegaron a presumir de serlo, eran modestas que de hecho usaban el pelo mal recogido, ya que la mayoría del tiempo se la pasaban bailando y divirtiéndose.
Solían concurrir a estas reuniones con una túnica (manto de tela), aunque en otras presentaciones a las ya antes mencionadas fiestas también aparecían completamente desnudas.
Unas de las peculiaridades que llamaba la atención de Las Tres Gracias es que siempre estaban representadas y asistían juntas y nunca por separado a las reuniones y fiestas, señal de la amistad y poder que poseían las tres.
Muy difícilmente se puede comparar con otras culturas del mundo en la cual haya existido representación de una diosa triple. (Ver también: Las Meninas)
Significado
La pintura de Las Tres Gracias es un cuadro repleto de significados simbólicos, cuya explicación es difícil y aún incierta de descifrar. Entre unas de muchas las versiones que se escucha, se dice que esta pintura está relacionada con el reino de Venus.
El famoso pintor Botticelli no manifiesta un cuento mitológico en específico, sin embargo para pintar esta escena sensual se inspiró en muchas variedades de fuentes literarias clásicas y contemporáneas. Para Botticelli las figuras mitológicas pueden vincularse con el matrimonio así como la era en principio de una nueva vida.
Los detalles naturalista de la pradera (aproximadamente cerca de 150 diferentes especies botánicas) el virtuoso uso del color y la elegancia de las figuras, han hecho de esta obra unas de la importante y fascinante para todo el mundo.
Ubicación de Las Tres Gracias
La pintura de las Tres Gracias su principal pinto fue Peter Paul Rubens, en el cual fue exhibido en el Museo del Prado de la ciudad de España, siendo esta su más famosa obra.
El cuadro del artista fue subastado y comprado por Felipe IV, quién lo utilizó para adornar su salón en el palacio de Alcázar en Madrid. Pasando luego a formar parte del Museo del Prado en España. El hecho de estar pintado sobre tabla indica la relación del maestro con la pintura flamenca antigua.
Análisis de Las Tres Gracias
Como en otros cuadros de los diferentes temas mitológicos, Rubens lo plantea diferente al de los artistas que intentaron reproducir la misma obra.
Por el cual era caracterizada por un sentimiento general de honestidad y honradez. Para Rubens Eufrosine, Talía y Aglaya no fueron más que una excusa para pintar tres entidades femeninas de las exuberantes formas de sus habituales modelos.
Esta forma de unión y perspectiva en cuanto a las manera en que se encuentran las tres gracias dispuestas en el conjunto de un baile alegre en la naturaleza, denota la alusión a la belleza humana.
Los cuerpos de las féminas dentro de la mitología griega, retoma el poder de las gruesas figuras femeninas que denotan estupor y grandeza. Proporcionándoles un realismo adecuado a la obra.
Al estar juntas forman una sutil elegancia armónica entre sus cuerpos, alegres y desenvueltas al mismo tiempo, dentro de un paisaje tranquilo y natural.
Las piezas claves del bosque, son los árboles de troncos fuertes y macizos que denotan el ímpetu de la naturaleza. Junto con el agua cristalina que brota de las pozas. Según la leyenda, se cree que una de las hermosas y frescas mujeres, está basada en la segunda esposa del artista.
Iconografía
Con respecto al asunto de esta temática de obra de arte, en la cual la tres figuras están enmarcadas por un árbol a la izquierda, con una rama larga que cuelgan varias túnicas, y a la derecha otro árbol y un gran jarrón sobre el que se apoya un ángel dorado como con una especie de cuerno de la abundancia.
De la que parece surgir un chorro de agua cristalina, y también de la que se engancha, en la parte superior, una guirnalda de flores que a su vez se enreda en la rama del árbol opuesto.
El grupo de Las Tres Gracias está conformado por tres mujeres jóvenes de cuerpos voluptuosos; una aparece de espaldas y las otras dos las podemos contemplar de perfil, ligeramente giradas hacia su derecha.
Las descripciones que se hicieron de ellas las exhiben desnudas y entrelazadas por los hombros, sin principio ni fin. La iconografía habitual de estas diosas, representadas tanto en piedra como en pintura se corresponde con la descripción literaria. (Ver articulo:Museo Británico de Londres)
Los colores utilizados en esta obra maestra, representan los enfoques clásicos del tono en el cielo. Los cuales tonifican la profundidad del espacio al fondo del mismo.
Los colores pálidos en su decadencia se tornan en los diferentes objetos de la pintura, dando el brillo adecuado. Con los matices de naranjas y rojos o borgoñas, se rematan los pisos de la misma, para dar torpemente las tonalidades expuestas. Colores cálidos llenos de alegría.
Esta pintura demuestra el singular estudio corporal buscando la anatomía del cuerpo femenino, cuasi perfecta que incluye el paisaje aledaño.
Algunas personas aparece que Las Tres Gracias, se encuentran bailando bajo un escenario improvisado de flores y con ropaje en las ramas de los árboles. Las Tres Gracias bailan de manera unísona, Un Ángel grande de madera con un cuerno al revés.
La túnica se enredaba con gracia entre las féminas, pasando enmarañado por el cabello recogido de la que se encuentra de espalda. Una de ellas se percata del brazo torneado de su compañera.
Comentarios
“La obra se realiza en un periodo barroco, es una pintura bien trabajada y que suele impactar por sus desnudos”. “Es caracterizada en los bajos países, se da en función del propagandismo con características del barroco el cual le da la emoción de simular, una especie de idealización en sus figuras “. “Se maneja un movimiento canon opulento, por sus variadas líneas curvas y el mismo color”
“Expresa mucha emoción, se pueden reconocer con facilidad las composición es de los rasgos barroco”. “La idea principal del tema, parece ser los comitentes, una nueva clase social, el rey la reina, el cual se evidencia su poder en la economía”. “En la obra el artista adopta influencias de otros autores, como por ejemplo Bernini”. “Se trabaja mucho con las pinceladas sueltas, el cual ayuda a que más adelante se manifieste en las obras de tipo barroco”